Y la tristeza se apoderó de mí mientras caminaba por las sucias calles de mi distrito, ese lugar tan frío y difícil de ubicar. Caminaba con la cabeza gacha y los brazos cruzados. Vi los titulares -sin querer deprimirme más-y un anuncio me hizo volver a nacer. En diciembre todo cambiaría, aparecería la luna cuarto menguante y algunas estrellas. O solo una. Y mis oídos solo de música ligera se encantarían.
Nunca vi más allá de donde estaba, nunca pensé que sacrificando mi verano, mi playa y mis estrellas hallaría una nueva ruta donde andar. El verano fue eterno y la niña morena fue mi acompañante.
¿Dónde está ella ahora? ¿Qué hace ella? Ya nunca me dirá palabra alguna. No la puedo olvidar, aún no lo logro, aún el crimen está irresoluto. Aún el calor del verano eterno quema mi piel.
Y rodeado de quimeras me dejé llevar. Un crimen la mujer extraña cometió. Y aún está irresoluto. Solo mis demonios interiores despejarán dudas y crearán incertidumbres. Soledad Angélica aún está presa en mi mente.
Todo está oscuro ahora. Una niña dulce se escapa de mis palabras, una mujer que fuma se me acerca y yo dejo que toque mi cabello, una misteriosa no deja de escribir.
Elle connait au ma vie.
En un profundo mar. Cuarto menguante.
Je ne regarde que la lune.
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